top of page

 

 

 

Existen actualmente numerosos métodos y tratamientos para la prevención de esta enfermedad que puede llegar a ser mortal. Éstos consisten fundamentalmente en dos grandes objetivos: la protección del individuo al protegerlo de contraer la enfermedad y la protección del colectivo reduciendo el papel de los perros infectados y disminuyendo la infección a largo plazo.

 

Control de los vectores:

Al ser una enfermedad transmitida mediante vectores (mosquitos) se hace indispensable intentar evitar en la medida de lo posible que dichos vectores piquen a nuestra mascota. Y ¿cómo podemos evitarlo?

 

  • Uso de repelentes y antiparasitarios tópicos (collares, pipetas, etc.) que tengan eficacia sobre flebotomos. Los collares suelen tener una duración de 6 meses y las pipetas deben combinarse junto con el collar al inicio de la temporada de flebotomos (abril-octubre) cada mes.

  • Mantener a los animales en el interior de las viviendas en los meses más calurosos en la medida de lo posible.

  • Control del medio ambiente usando mosquiteras en puertas y ventanas y repelentes de mosquitos.

 

Test de leishmania anuales:

Dichos controles se recomiendan hacerlos fuera de la época de transmisión (noviembre-marzo) para poder detectar a tiempo si nuestro animal contiene el parásito (esto no significa que esté enfermo, únicamente si está infectado o no). Dichos test son muy rápidos y con ellos podemos detectar la enfermedad precozmente por lo que resultan de gran utilidad.

 

Vacunación de leishmania:

A partir de los 6 meses de edad podemos comenzar la pauta de vacunación de nuestro perro contra la leishmania. Es diferente a los métodos preventivos antiparasitarios, el objetivo de la vacunación es la inmunoprofilaxis en los animales sanos inoculando fases del parásito para que el sistema inmunológico de nuestro animal sea capaz de luchar contra el parásito si alguna vez entra en contacto con él. Previamente debe realizarse un test rápido de leishmania que debe ser negativo. Consiste en 3 dosis con un intervalo de 3 semanas entre ellas y revacunación anual previo test.

 

Uso de moduladores de la inmunidad:

Hay determinados fármacos que estimulan el sistema inmunológico de nuestra mascota y de esta manera es más eficaz contra la lucha del parásito. Se pueden usar al inicio de la estación del flebotomo con frecuencia cuatrimestral variable (hasta 3 veces al año) según prevalencia de la zona. Podéis consultar a vuestro veterinario sobre el uso de estos fármacos.

 

 

 

Actualmente existen muchos métodos de prevención y diagnóstico de esta enfermedad crónica y mortal en muchas ocasiones y que además es tan prevalente en nuestro país y cada vez se extiende a más zonas y a más meses del año.

Vuestro veterinario os dirá el mejor método de prevención para vuestro mejor amigo así como pautas para poder evitar su transmisión.

No debemos olvidar que la leishmania es una zoonosis y que al igual que pueden picar a nuestro perro pueden picar a las personas por lo que el control sobre nuestros animales se hace imprescindible.

Métodos de prevención de leishmaniosis canina
Urgencias 24 h.
609 879 958
bottom of page